El mundo de las marcas registradas suele evocar imágenes de logotipos y nombres de marca. Pero, ¿qué pasa con los demás elementos sensoriales que contribuyen a la identidad de marca? ¿Pueden los eslóganes que te resuenan en la cabeza, el timbre característico de un camión de helados o incluso el evocador aroma de un auto nuevo estar protegidos por la ley de marcas registradas? La respuesta es sí, aunque el proceso difiere ligeramente de los métodos tradicionales.
Tradicionalmente, las marcas registradas se han centrado en elementos visuales que identifican fácilmente la fuente de un producto o servicio. Sin embargo, con la creciente importancia de la experiencia de marca en todos los sentidos, las empresas buscan protección para marcas registradas no tradicionales. A continuación, se muestran algunos ejemplos:
Si bien se reconocen estas formas no convencionales de marcas registradas, obtener protección no es tan sencillo como registrar un logotipo. El factor clave es la distinción. A diferencia de un logotipo que es inherentemente único, un eslogan, un sonido o un olor ya pueden existir o ser fácilmente replicados. Esto es lo que consideran las oficinas de marcas registradas:
El proceso para registrar marcas registradas no convencionales generalmente sigue los mismos pasos que las marcas registradas tradicionales:
Si bien obtener protección de marca registrada para elementos no convencionales requiere más esfuerzo, es una estrategia valiosa para las marcas que buscan un enfoque integral de la identidad de marca. Al registrar marcas registradas para eslóganes, sonidos e incluso olores, las empresas pueden crear una experiencia de marca verdaderamente multisensorial que esté legalmente protegida contra la imitación. Recuerde, una marca fuerte es más que solo un logotipo; es una sinfonía de vistas, sonidos e incluso olores que resuenan entre los consumidores.